Nunca había sido de quererme mucho,aunque siempre he sido optimista y he pensado que valgo mucho y todo ésto...pero realmente es con los años cuando me he dado cuenta de que cada uno de nosotros valemos un montón y que tenemos que empezar a querernos a nosotros mismos.
Y nos tenemos que querer como estemos en ese momento, más delgados, más gordos, con menos pelo, con rastas, con tatus, con gafas, con lentillas, da igual...porque exteriormente vamos a pasar por mil cambios a lo largo de nuestra vida, unos voluntarios y otros no, pero en el interior seguiremos siendo en esencia nosotros mismos.
El otro día una de las mamás comentaba que dejaba a la niña en clase y se iba al spa, otra que estaba ahí dijo, jolín, qué bien te lo montas.
La otra le contestó, sólo tengo éste cuerpo y si no lo cuido, a ver quién va a llevar la casa, a los niños, mi trabajo a turnos y tener mis momentos con mi marido...
Y tiene razón, nos tenemos que cuidar,valorar más y querernos tal como somos en cada momento de nuestra vida.Hay días que no te ves bien, con o sin motivo, pero yo, que además tengo una facilidad para coger o soltar diez kilos como si nada, normalmente,siempre me veo bien, y me veo bien porque me creo que es así, y porque qué narices...porque yo lo valgo, como la mayoría de nosotros
Yoli
2 comentarios:
Estoy aprendiendo eso ahora, así que supongo que aún estoy a tiempo de quererme como Dios manda. Biquiños!
Yo he aprendido a quererme también de unos años a esta parte, con lo que comentas que todos cambiamos exteriormente (eso es inevitable por H o por B) pero hay que quererse y darse los caprichos que uno quiera siempre que nos lo podamos permitir y no hagamos daño a nadie, por qué no?
La vida es muy corta y no sabemos cuando se nos va a acabar "el ticket" de este viaje sólo de ida...
Un besoteee
Publicar un comentario