Nada mejor que despedir este año con humor, y para ello,lo mejor Oregón tv,porque hay que saber reirse de las desgracias y sobrellevarlas
Feliz 2014
Yoli
| éstas sí que sabían...tan rícamente tomando el sol |
| Visita al Malkorra,es impensable no entrar |
"Por SAMUEL ARANGO M. | Publicado el 8 de octubre de 2012 - El Colombiano
Las mujeres y hombres maduros de ahora hemos llegado a una edad
maravillosa en la que emprendemos el camino del desaprendizaje. Fuimos
criados con la creencia de que debíamos ser los mejores en todo:
mejores estudiantes, mejores esposas, mejores esposos, mejores
profesionales, mejores madres y padres, etc. Fuimos educados con la
creencia de que TODO es pecado. Ha llegado la hora del desaprendizaje
o lo que mi hija llama graciosamente, el importaculismo.("Todo me
importa un culo"). Ha llegado la hora de decir NO en muchas ocasiones,
de mandar al carajo los compromisos y las obligaciones. Pasó la hora
de las responsabilidades desvelantes. Ahora nos gusta estar solos,
disfrutar buenas conversaciones con gente que no nos insulta y que
cree lo mismo que nosotros o que no le importa que opinemos diferente.
Es la hora de hablar de todo sin necesidad de sostenerlo como medio de
defensa. Es hora de ver películas, de estar en una finca durante la
semana, de leer, de escuchar, de sonreír y de burlarse de la mayoría
de los mortales que viven pendientes de las pendejadas.
Nosotros ya demostramos que las responsabilidades fueron bien
atendidas por nosotros, que hicimos las cosas lo mejor posible, que
dejamos huellas, que somos buenas personas.
Lo que nos queda de vida es para nosotros, para disfrutar, para
cumplir el mandamiento divino de amarnos a nosotros mismos. Por eso
vamos a hacer lo que nos da la gana. Viajar al máximo, tomando café
con amigas y amigos, conversando con todo el que nos encontremos. Ya
pasó la época de los roles. Lo que fuimos, fuimos; ahora somos para
nosotros mismos sin tener que rendir cuentas a nadie. Los demás
seguirán su camino de responsabilidades y de afanes, de preocupaciones
y nerviosismos. Nosotros ahora, estamos por encima del bien y del mal.
Vamos a museos, asistimos a conferencias y si no nos gusta nos salimos
sin que nos importe, redescubrimos al Quijote y a Fernando González.
Ahora asistimos con mayor frecuencia a entierros y nos damos cuenta de
que se aproxima el nuestro, pero estamos preparados, pues al fin y al
cabo vivir es mortal. La vida es para nosotros una profunda
experiencia interior, lejos de mitos, ritos, limosnas y pecados sin
fin. Es la hora de empezar a relajarnos y de conversar largas horas
con uno mismo, que es el único que permanece siempre, ahora y después
de que abandonemos la nave del cuerpo.
Nos rodean pocos seres a quienes amamos profundamente y que seguirán
viviendo sus propias experiencias, estemos nosotros o no. Mandaremos
para donde sabemos a la gente que nos molesta, la tóxica. Quienes nos
buscan sin egoísmos van a encontrar una sonrisa, una mirada tierna y
comprensiva, un consejo acertado o no, afecto.
Somos, ahora sí, libres de ataduras, de prejuicios, de creencias.
Somos libres si no le tememos ni a la vida ni a la muerte."
Yoli